[1] Hermann, profesor de economía política, publicó en 1869 en el periódico austriaco Neue Freie Presse un artículo sobre las ventajas económicas que supondría para la Hacienda pública la introducción de la tarjeta postal (la Correspondenz-Karte).
La otra cara estaba completamente en blanco para que se pudiera escribir en ella un mensaje.
Ese es el formato de las postales antiguas, que se mantuvo hasta cerca del año 1960.
Las postales modernas son un poco más grandes, midiendo alrededor de 10,5×15 cm.
Esas postales hoy en día son objeto de coleccionismo, por su gran valor documental.
Hasta la Primera Guerra Mundial (1914-1918), las mejores imprentas eran las del área germánica (Alemania, Austria y Suiza), que destacaron por la perfecta producción de postales impresas con los procedimientos llamados fototipia y cromolitografía (litografía en varios colores).
Esta casa fue fundada por dos impresores suizos: los señores Oscar Hauser y Adolfo Menet.
Su empresa está considerada la primera que editó postales de vistas y monumentos en España, a partir del año 1892.
Hasta el año 1950, la empresa Hauser y Menet mantuvo el sistema de impresión en fototipia.
Es decir, si la postal lleva un "I", la imagen fue impresa en 1958; una "V" sería 1962, "IX" 1966, y así sucesivamente.
[9] Una postal virtual es la que se manda a través de internet, normalmente por correo electrónico.