Los Blazers son además una de las franquicias NBA con mayor apoyo del público; desde 1977 hasta 1995, el equipo llenó su estadio durante 814 partidos en casa consecutivos, la mayor racha en la historia del deporte profesional estadounidense hasta ese momento, siendo desde entonces solo sobrepasados por los Boston Red Sox en la MLB.
Petrie promedió 24.9 puntos por partido, superando los 23.8 de Wicks, aunque el último disputó su primer All-Star y único como titular en su carrera.
El error fue evidente al comprobar que jugadores como Bob McAdoo y Julius Erving fueron elegidos posteriormente.
Erving anotó 40 puntos en el partido, pero los Blazers salieron vencedores por 109-107 y se convirtieron en los nuevos campeones de la NBA en la primera participación del equipo en playoffs en su historia.
Walton era la estrella y el jugador más reconocible de los Blazers, con su ostentosa personalidad, sus inclinaciones contraculturales (que encajaban con el ambiente general que existía en Portland a mediados de los 70) y su estilo intenso e inteligente del juego.
Los actuales campeones no tuvieron problemas en la temporada regular 1977-78 y accedieron fácilmente a playoffs tras ganar 58 partidos, el mejor registro en la NBA.
En el tercer año de Ramsay al frente del equipo, los Blazers consiguieron 45 victorias, 13 menos que la temporada anterior.
[14] En la temporada siguiente, los Blazers no se clasificaron para playoffs por primera vez desde 1976 (y por última hasta 2004) tras firmar un balance de 42-40.
Thompson lideró al equipo en anotación con 20.4 puntos por partido, en rebotes con 11.7 y en minutos jugados con 39.6, batiendo un récord de franquicia en este apartado estadístico.
[18] Este lideró a los Blazers en anotación con 22.4 puntos por partido y logró un récord de franquicia con su 89.6% en tiros libres.
Drexler mejoró hasta los 17.2 puntos, capturó 217 rebotes ofensivos y robó 177 balones (líder de su equipo en ambas categorías).
Con una plantilla envejecida, los Blazers bajaron hasta las 51 victorias y fueron eliminados en primera ronda de playoffs por San Antonio Spurs.
La identidad de los mismos nunca fue revelada, y no hubo cargos criminales, pero los Blazers sancionaron económicamente a 4 jugadores.
En playoffs, los Blazers cayeron ante los Lakers en primera ronda por quinta vez consecutiva,[33] por lo que Carlesimo fue despedido y Mike Dunleavy ocupó su cargo.
En cuanto al juego colectivo, la buena defensa del equipo dejó a sus rivales en 88.5 puntos por partido, el mejor promedio en la historia de la franquicia.
Scottie Pippen, que había llegado al equipo en verano procedente de Houston Rockets, fue elegido en el segundo mejor quinteto defensivo.
Sin embargo, tras caer 105-97 en casa ante Vancouver Grizzlies, el equipo entró en una racha negativa en la que solamente vencieron en 8 de 22 encuentros aunque logró la clasificación para los playoffs.
El equipo no estuvo fuerte en ataque, promediando solamente 80 puntos en los primeros 10 partidos de temporada y permitiendo a los rivales canastas fáciles.
En el séptimo partido, Portland estuvo a punto de hacer historia hasta que los Mavericks apretaron en los minutos finales y se hicieron con la victoria.
Sin embargo, la buena noticia fue el gran nivel mostrado por Zach Randolph, que en su tercer año de profesional promedió 20.1 puntos, 10.5 rebotes y 2 asistencias por partido, liderando a los Blazers en dobles-dobles con 43.
Jeff Pendergraph y el rookie Elliot Williams sufrieron lesiones de rodilla que los lastraron toda la temporada.
Sin embargo, las lesiones tuvieron algo positivo, LaMarcus Aldridge emergió como líder del equipo y Wesley Matthews reemplazó dignamente a Roy.
Pensando que los Blazers aún podían hacer un buen papel en playoffs, Rich Cho ejecutó un gran traspaso con Charlotte Bobcats en febrero de 2011.
Dante Cunningham, Joel Przybilla y Sean Marks desembarcaron en Charlotte a cambio del All-Star Gerald Wallace.
El nuevo mánager de Portland, Chad Buchannan, se vio obligado a firmar tres agentes libres: Kurt Thomas, Jamal Crawford y Craig Smith.
Esta fue la primera temporada de los Blazers desde 2005-06 sin LaMarcus Aldridge cuando se unió a los San Antonio Spurs durante el verano.
Sin embargo, su temporada terminó en la siguiente ronda con una derrota ante el campeón defensor de la NBA Golden State Warriors en cinco partidos.
Luego del desconcierto generado la NBA decidió mover la organización a una burbuja sanitaria ubicada en la ciudad de Orlando.
Sin embargo, a pesar del buen nivel de Damian Lillard, los Trail Blazers cayeron ante los Denver Nuggets por 2-4.
Tras la derrora en los playoffs, los Blazers y el entrenador Terry Stotts acordaron mutuamente separarse después de nueve años.