Se atribuye al alemán Donner su invención, en el siglo XVIII.
El oboe moderno tiene dos portavoces, a menudo interconectadas, un para re4 hasta sol♯4 cerca del pulgar izquierdo, y otra para la4 hasta do5 a la derecha y sobre las llaves frontales, hundido cercano al dedo índice izquierdo.
El fagot tiene llaves parecidas para el pulgar izquierdo, pero solo se oprimen en el ataque de las notas o en movimientos rápidos como los trinos.
En el saxofón, el portavoz se encuentra cerca del lugar donde descansa el pulgar izquierdo.
Al pulsar la llave de octava se abre el agujero más alto situado en el cuello del saxofón.