Desde un punto de vista topológico, un polígono se llama simple cuando su frontera puede ser puesta en correspondencia 1-1 con una circunferencia mediante una aplicación biyectiva y bicontinua.
[2] Igualmente, su interior puede ser puesto en correspondencia con un disco abierto.
Un polígono será no simple si su frontera es una línea poligonal que se autointerseca, o si su frontera consta de más de una línea polígonal.
Regulares Irregulares Cóncavos Existen varias maneras de clasificar los polígonos, según se atienda a la forma de su contorno, al número de lados, o a alguna otra propiedad del mismo.
Atendiendo a su convexidad, los polígonos simples pueden ser: Atendiendo a su regularidad, los polígonos simples pueden clasificarse en: En geometría computacional existen varios problemas importantes donde una de las condiciones iniciales dadas es un polígono simple: