Poeta ante la Cruz
Finalizado el acto una procesión final devuelve la imagen a la capilla.Se optó por retrasar un año la primera salida procesional, pero se propuso al cabildo catedralicio trasladar la imagen del Cristo al coro de la Catedral y que allí un poeta recitase sus versos sobre la Pasión a modo de oración.El canónigo Victoriano García Pilo propuso incorporar un coro al acto, que fuese intercalando motetes y cantos penitenciales entre poema y poema.[2] En 1987 estaba prevista la intervención De Francisco Soto del Carmen como poeta, pero una enfermedad se lo impidió y, en su lugar, Antonio Lucas Verdú hizo un recorrido por textos de distintos poetas que habían meditado sobre la Pasión en sus obras.En 2002 José María Sánchez Terrones leyó textos de Unamuno.