Poder moderador

La construcción idealizada por el francés Benjamin Constant predica la existencia de cuatro poderes; junto con el Ejecutivo, Legislativo, y Judicial, coexiste el Poder Moderador, que se encargará del equilibrio de los otros.

Por la forma en que fue diseñado, se sitúa jerárquicamente por encima de los demás poderes del Estado.

Pedro I (y más tarde su hijo, Pedro II) era el titular exclusivo, con la atribución de nombrar y destituir libremente a los ministros de Estado, en su calidad de Jefe del Poder Ejecutivo, ejerciendo este último a través de sus ministros, a los que, por medio del Poder Moderador, les otorgaba libre nombramiento y dimisión.

En 1846 se instaura el parlamentarismo, reduciendo así la influencia de este poder del Estado brasileño.

En Portugal, fue la prerrogativa soberana del régimen constitucional hasta 1910.