Refiriéndose a la plaza, en su discurso ese día, el Papa Juan Pablo II manifestó: El proyecto original contempló que la plaza estuviera ubicada entre las calles 45 y 53, carreras 45 y 46, pero a fines de los años 1980, el Banco de la República construyó su nueva sede en la ciudad en la manzana comprendida entre las calles 45 y 47, carreras 45 y 46.
El proyecto fue cancelado debido a la protesta de la ciudadanía.
[7] Desde sus inicios, la plaza ha sido un importante escenario de protesta social, llegando a convertirse en un espacio en donde convergen «los actores y adversarios de las movilizaciones sociales en Barranquilla».
En marzo de 2012 se anunció que la totalidad de las obras se entregaría en junio de 2012,[11][12] pero en diciembre de 2012 los trabajos no habían culminado, por lo que el gobernador del departamento del Atlántico, José Segebre, anunció que se entregarían únicamente cuando hubieran terminado.
Inicialmente, el proyecto se vio envuelto en una controversia a causa del diseño arquitectónico que contemplaba la tala de árboles y la construcción de una explanada en concreto rígido, lo cual elevaría la alta temperatura de la ciudad.
[30] La ampliación incluye fuentes luminosas, zonas verdes, skatepark, restaurantes de comida rápida y la restaurada casa Catinchi, que junto al Cubo de Cristal conforma un complejo gastronómico.