Plaza de Uncibay

Junto a algunas calles aledañas, ocupa una superficie de forma casi triangular de aproximadamente 1160 m².

La plaza debe su nombre al capitán vizcaíno Fernando de Uncibay, el cual participó en la toma de la ciudad junto a los Reyes Católicos.

Entre los edificios que rodean la plaza destacan los números 4 y 9.

La plaza ha sufrido importantes transformaciones, siendo la más reciente la que se llevó a cabo en 1989, según el diseño de los arquitectos Luis Bono Ruiz de la Herrán y José Fernández Oyarzábal, a los que se debe el obelisco, la eliminación del aparcamiento y parte del tráfico.

Las esculturas mitológicas del Rapto de las sabinas y la Muerte de Acteón son obra del escultor malagueño José Seguiri.

La plaza en los años 1950