Plan de Asistencia Nacional a la Emergencia Social
Por otro lado, la sequía y el brote de aftosa que afectó a la ganadería ocurridos en 2001 repercutieron sobre las exportaciones.Entre 2005 y 2007 se postularon casi una cuarta parte de los uruguayos al plan.[2] Los objetivos del plan fueron darles oportunidades a los hogares participantes para a mediano plazo salir de su condición de pobreza extrema, exclusión social y económica y crear estrategias para que los hogares no vuelvan a situaciones de indigencia; garantizar cobertura a las necesidades básicas y generar las condiciones para que puedan ejercer sus derechos sociales.[2] El PANES estuvo integrado por los siguientes programas: El Ingreso Ciudadano consistió en una transferencia monetaria fija a todos los hogares beneficiarios del plan, excepto a aquellos que estuvieran en Trabajo Uruguay o en el Programa Alojamiento a las Personas en Situación de Calle, independientemente de la composición del hogar.Con respecto a estos, puede considerarse que el programa estuvo bien enfocado a su población objetivo, pues los beneficiarios fueron las personas del primer y segundo quintil de ingreso.Las actividades fueron llevadas a cabo por organizaciones sociales tales como ONG, comisiones vecinales y sindicatos.Entre un 14 % y un 33 % de los participantes reportó haber percibido mejoras en sus destrezas en lectoescritura y lógica matemática, aunque estas mejoras fueron calificadas como «leves» por los propios participantes.También se detectó un mayor conocimiento en derechos civiles, pero en menor medida y de baja significación.A través de un sorteo público entre las personas interesadas del plan, se seleccionaron personas para desempeñar trabajos ofrecidos por organismos públicos y organizaciones de la sociedad civil.Para esto el MIDES firmó un acuerdo con 22 organismos públicos y 543 organizaciones de la sociedad civil.[7] La jornada laboral era de seis horas y el salario era el doble del Ingreso Ciudadano.Las personas que desempeñaban estos empleos transitorios dejaban de recibir el Ingreso Ciudadano.Las tareas realizadas no aportaban a la capacitación por ser estas rutinarias o extensiones de labores domésticas.[2] Este plan estuvo dirigido a los hogares con emergencia habitacional crítica, cuyas viviendas eran asentamientos irregulares, y tuvo la finalidad de mejorar las viviendas a través de la entrega de materiales a los hogares para la auto construcción y del apoyo técnico.Asimismo, los estudiantes de la UDELAR que hicieron el relevamiento en los hogares no estaban capacitados con la suficiente información.En sí, solo se les instruía de cómo llenar un formulario y trasladarlo a otra dependencia.[4] En 2005, el presidente del Partido Independiente, Pablo Mieres, dijo que el Plan de Emergencia fue como arrancar de cero, y que pudo haberse aprovechado la información del Plan CAIF y las Asignaciones Familiares para partir desde allí.