[2] Se suele servir a temperatura templada o caliente.
No debe confundirse por similitud fonética con el zorongollo extremeño.
A veces se adereza con hierbas aromáticas (orégano) y especias (pimienta).
[3] Tradicionalmente el zarangollo no lleva patata, pero se le empezó a incorporar esta última en ausencia de calabacín, por lo que hoy en día es normal encontrarlo preparado con ambos ingredientes simultáneamente.
El pisto de calabacín es una receta manchega y murciana, esta última derivada del zarangollo, al que se agrega calabacín, pimiento, tomate o incluso calabaza.