Las pirazolonas son un grupo de medicamentos que se emplean principalmente como analgésicos y antipiréticos, es decir para el tratamiento del dolor y la fiebre.
Ejemplos de ellos son el metamizol o dipirona (el más popular), propifenazona, fenilbutazona y oxifenbutazona.
Estos medicamentos se han retirado del mercado en varios países por provocar agranulocitosis y anemia aplásica, efectos secundarios graves, pero de aparición muy infrecuente.
Tienen propiedades analgésicas y antitérmicas, el metamizol posee una acción relajante del músculo liso por lo que es útil en el tratamiento del cólico nefrítico.
La fenilbutazona posee también propiedades antiinflamatorias, pero debido a sus efectos secundarios, su empleo no está recomendado en ningún proceso reumático.