[1] El monumento, erigido en los años 1823-1825 sobre la cripta del fundador de la ciudad, el margrave Carlos III Guillermo, es un conocido símbolo de la ciudad, considerado el segundo emblema de la misma tras el diseño de la ciudad en forma de abanico plegable.
Cuando Karlsruhe empezó a crecer a principios del siglo XIX, la iglesia resultó demasiado pequeña para la congregación local y además obstruía la expansión hacia el sur de la ciudad y de la propia plaza del Mercado.
[2] Aquel monumento sería reemplazado, 16 años más tarde, por una edificación piramidal de piedra diseñada por el arquitecto Friedrich Weinbrenner (el arquitecto de la ciudad de Karlsruhe) al estilo neoclásico, que ha sobrevivido hasta el día de hoy (no viéndose afectada por los extensos bombardeos de la Segunda Guerra Mundial).
[2] El monumento original de madera fue trasladado a la nueva ubicación de la iglesia.
Consiste en una secuencia vertical de tres cámaras, estando en la más baja de ellas la cripta original.