Picnic (obra de teatro)

[1]​ La obra, tal y como lo trata de representar Arrabal, es un claro alegato contra la guerra.

En la actualidad se sigue representando en todo el mundo «para evidenciar lo absurdo de la guerra sorda» según las palabras del propio autor, quien también reseña se trata de la obra más interpretada en todo el mundo.

Es de relevancia citar brevemente unos extractos para entender mejor todo lo comentado: «Sí, es que disparo sin mirar.

«Cuando cogen a los prisioneros, les ponen chinchetas en los zapatos para que cuando anden se hagan daño».

Este personaje se unirá, finalmente, a este pícnic de manera amistosa y, los cuatro, empezarán a comentar lo que pasa en la guerra: cómo han llegado hasta allí, lo que hacen para entretenerse...

Escenario teatral en Esperanto en agosto de 1986 (Israel): de izquierda a derecha Zepo, Zapo y Señor Tepán