Picanyol

Artists, dirigida por Josep Toutain, dio una oportunidad a muchos profesionales e ilustradores del cómic.

Después de intentar, sin éxito, publicar historietas del Oeste y aventuras en un estilo de dibujo realista, encontró en el dibujo humorístico la vía que le permitiría realizar un trabajo personal y genuino.

[4]​ Con el tiempo, Picanyol, llegó a colaborar con numerosas revistas y periódicos, e incluso con la televisión (TV2, circuito catalán, 1983-1986).

Esta revista, completamente dedicada a los pasatiempos, tuvo continuidad en los cuadernos Picajocs, de Barcanova (1991), y en las colecciones La Rata Savia (1.ª ed.

Entre 2005 y 2006, y en un momento de crisis creativa,[6]​ se dedicó a escribir su autobiografía que publicó en catalán con el título Històries d’una pensió, donde relata las experiencias vividas en los años 50, cuando su madre abrió una pensión en Moyá.