[2][3] Siria e Irak, bajo el baazismo, eran países más o menos laicos, en los que los homosexuales podían llevar una existencia oculta, pero relativamente tranquila.
[5][2] Subhi Nahas, refugiado sirio en Estados Unidos que ha declarado ante la ONU sobre las atrocidades en Siria, hablando en nombre de la Organization For Refuge, Asylum & Migration, ha afirmado que el peligro no solo proviene del Dáesh, sino también del Gobierno y de grupos como Ahrar ash-Sham o la llamada «Corte Judicial de Alepo».
La declaración decía: «El tribunal islámico en Wilayet al-Furat [tierra fronteriza entre Siria e Irak] ha decidido que un hombre que ha practicado la sodomía debe ser lanzado desde el punto más alto de la ciudad».
En las fotos se podía ver a un hombre sin identificar, con los ojos vendados, que estaba siendo lanzado al vacío por ser gay.
Una multitud se había reunido al pie del edificio para observar la ejecución.
Las fotos fueron publicadas en Internet usando redes sociales y en un informe del grupo terrorista titulado «Implementación del castigo a aquellos que han cometido actos de homosexualidad» en el foro yihadista en línea, Shumoukh Al-Islam.
En Twitter, varios islamistas emplearon el hashtag #LoveWins en respuesta a este evento.
[30] La organización Syrian Observatory for Human Rights calculaba en enero de 2016 que, solo en Siria, habían sido asesinadas por lo menos 25 personas por su supuesta orientación sexual.
De entre ellos, tres habrían sido fusilados, seis lapidados y dieciséis tirados desde un edificio.
El joven fue detenido en Deir ez-Zor (Siria) en casa de al-Jazrawi, fue juzgado inmediatamente por un tribunal islámico, condenado a muerte y ejecutado arrojándolo al vacío desde un edificio.
Abu Zaid al-Jazrawi también fue juzgado, pero salvó la vida cambio de ser degradado y enviado al frente.
La ejecución fue filmada y publicada en las redes con una advertencia: «No alcances los límites de Alá».
[39] En mayo de 2016, el ganador del concurso Míster Gay Siria, Hussein Sabat, celebrado en Istanbul como desafío al Dáesh, reveló que su novio había sido decapitado por Dáesh tres años antes y el vídeo de la decapitación enviado a la familia del fallecido.
[40][41] Autoproclamados miembros del Dáesh también realizaron ataques homófobos en Estados Unidos y Europa.
[45][46] Antes de realizar el atentado, Mateen llamó a la policía para decirles que su lealtad estaba con Estado Islámico.
Las protestas en contra de las ejecuciones y asesinatos han tomado diversas formas.
El autor del juego, Michael Garber, ha declarado que «quería hacer un juego que mostrase un asunto serio al que nos enfrentamos en el mundo actual [...] ese asunto es el fundamentalismo islámico y cómo enseña intolerancia hacia, no solo homosexuales y mujeres, sino también hacia los no musulmanes».