Pereña de la Ribera

Pereña podría ser un topónimo latino, formado en época romance por repobladores cristianos, entre los siglos X y XII.

Junto a la ermita se encuentra un mirador que ofrece una vista privilegiada sobre el río encajonado.

El nombre hace referencia al efecto producido por la espuma del agua tras caer desde una gran altura y se puede observar en su plenitud en primavera.

[2]​ Pertenece a la Mancomunidad Arribes del Duero y al partido judicial de Vitigudino.

En las zonas en las que la penillanura comienza a perder altitud, aparece la encina, en un principio intercalada con quejigos y más tarde, como especie dominante.

Además, algunas laderas han sido aprovechadas para cultivar frutales, entre los que destacan el almendro, el olivo, el cerezo y, en menor medida, la vid.

Estos antiguos textos nos hacen pensar que estas aldeas fueron fortificadas en dicha época, para evitar nuevas ocupaciones portuguesas como las que realizó en 1296 el rey Dionisio I de Portugal, que ocupó hasta Simancas (Valladolid) y se anexionó posteriormente toda la comarca de Ribacoa.

Durante los reinados de Alfonso XI, Pedro I y Enrique II, el territorio de las Arribes del Duero vuelve a señorializarse y a tener sentido militar.

Poco después comienzan las obras para reconvertir la fortaleza de Pereña en iglesia.

Respecto al año 2000, el censo refleja 557 habitantes, de los cuales 281 eran hombres y 276 mujeres.

La actividad vitivinícola ha sido la más característica y todavía persiste a pesar del envejecimiento acusado de la población.

No hay que olvidar la presencia de parcelas dedicadas al cultivo del Olivo y el Almendro.

Visera abierta, dejando ver tres rejillas forradas de gules.

Gracias al voto del concejal socialista tránsfuga Olegario Vicente Martín, la moción desbancó de la alcaldía al PSOE, pasando a ocupar el cargo de alcalde desde ese momento, el edil popular José Ortigosa, que fue echado del partido junto con los otros dos populares, en cumplimiento del Pacto Antitransfuguismo.

Situada en su parte más alta, la torre marca la silueta del pueblo visible desde los distintos caminos.

La portada original queda parcialmente oculta por un soportal realizado en el siglo XVIII y la cruz que remataba la torre fue colocada a finales del siglo XX en reparación de los efectos del tiempo y los rayos.

[20]​ En la cumbre del Berrocal junto a la ermita actual se encuentran evidencias de asentamientos desde épocas prehistóricas.

Desde Masueco se accede por un camino que baja a un mirador situado por encima de la cascada.

Destaca su cueva a la que se accede superando unas rocas y un pequeño camino, y que una vez allí se pasa por detrás de la cascada y es en la cueva donde aparte de tener una preciosa vista, se podrá percibir por la fuerza de la caída del agua ese «Airón» que le da nombre al paraje pereñano.

En Pereña de la Ribera existen varios miradores desde los que se pueden obtener unas amplias vistas panorámicas.

[22]​ Con esta iniciativa se trata crear un incentivo para atraer visitas al pueblo.

Detalle del Reino de León en The kingdoms of Portugal and Algarve from Zannoni's map, realizado en 1794 por J. Lodge, en el que aparece Pereña
Detalle del oeste salmantino en un mapa del siglo XVIII , en el que se puede observar Pereña (escrito Pereno )
Representación heráldica del blasón aprobado
Representación heráldica del blasón aprobado
Iglesia de Santa María en fotografía anterior a la caída del rayo de 2009
Ermita de Nª Sra. del Castillo
Vista del Duero desde el mirador de la Ermita de Nª Sra. del Castillo
Ambiente de la ermita en fiestas
Pintura mural. Edición 2021