Asaltó buques de la Armada Inglesa y española.
Fue apresado en innumerables ocasiones pero siempre logró evadirse gracias a sus estratagemas: disfrazado de almirante, general o peregrino burlando así a sus carceleros.
Consta además que asaltó la cárcel de Bayona y consiguiendo liberar a cuatro presos.
Se codeó con Napoleón quien le ofreció un puesto en la armada francesa que rechazó.
[1] Falleció en Hendaya en 1856 con 91 años tras librar mil batallas en las que tan solo perdió un ojo.