[3] Los arzobispos compostelanos solían conceder propiedades rurales, e incluso villas de la Tierra de Santiago, a título de tenencias, préstamos, beneficios o mandaciones, con la obligación de rendirle reconocimiento de jurisdicción, es decir, pleito-homenaje.
[4] En ese sentido, el arzobispo Lope de Mendoza otorgó en feudo, a Pedro Bermúdez de Montaos, la fortaleza de Penaflor en 1415 y, cinco años más tarde, la de Xallas.
En 1430 fue convocado por el propio arzobispo para recuperar las fortalezas de Mesía y Cira que habían sido ocupadas sin permiso episcopal.
[5] Pedro Bermúdez de Montaos se casó con María das Mariñas, de quien enviudó sin descendencia.
[6] Se desposó en segundas nupcias con Leonor de Castro y Guzmán, hija de Alonso de Castro, de quien nacieron cinco hijos: Pedro, Fernando, Isabel, María y Beatriz.