Pastor Chiribaya

Ermanno Maniero, presidente del Kennel Club del Perú y la médica veterinaria Viviana Fernández de la Universidad de San Marcos examinaron exhaustivamente las momias halladas y determinaron que estos canes tenían el cuerpo más largo que alto; poseían abundante pelaje de color que podía variar entre el amarillo y el rojizo, algunos con manchas oscuras sobre el lomo o la cabeza; que tenían las orejas recortadas y caídas; y sus patas era tipo "liebre", es decir que permitían al animal moverse sobre la arena o la tierra con menos esfuerzo, cualidad que quizá sea la que le dio la importancia dentro de la estructura de vida chiribaya.[4]​ "Al tener tantas llamas, los chiribayas necesitaron perros para el pastoreo.Entonces, estos se convirtieron en compañeros de trabajo por lo que a su muerte recibieron los honores correspondientes", dice Sonia Guillén.[1]​ Su pelaje amarillo, orejas caídas y hocico corto coinciden con las características de las momias.[1]​ Va a ser un trabajo de varios años, pero vale la pena", dice la documentalista.
Probable descendiente de pastor de Chiribaya.
El Pastor Chiribaya y sus descendientes se encuentran sobretodo en la región de Moquegua .