Paseo del Salón de Isabel II
Por el postigo del Sol, se accede a la judería de Segovia.Del paseo del Salón parten dos bajadas: una desde la puerta de la Luna, que por una gradería con escalones se dirige hacia el barrio de San Millán; y la otra desde la puerta del Sol, que va hacia la puerta de San Andrés.[2] En 1788 la explanada ya había sido nivelada y tenía casi terminados los dos tramos de bajada, que confluían en las riberas del Clamores.[4] En 1859 se trajeron árboles de Madrid para realizar una nueva plantación y en lo sucesivo se esbozaron numerosos proyectos para ampliar la explanada y mejorar las bajadas a San Millán, especialmente la del juego de pelota, que desembocaba en la actual calle de San Millán, lugar donde en la segunda mitad del XIX hubo una rudimentaria instalación para jugar a la pelota.Se ubicó sobre un pedestal que era una fuente labrada, en piedra rosa de Sepúlveda, por el artista y profesor del Instituto Toribio García de Andrés y diseñada por el arquitecto municipal Manuel Pagola Bireben, en el año 1927.