Una mezquindad que surgió en el seno del movimiento y acabó con la iniciativa.
[1] En la mencionada convención quedó constituida la mesa directiva del partido encabezada por José González Castillo como presidente y Augusto Álvarez como secretario general a cargo también, de la campaña electoral.
En 1926 el partido llevó como candidatos a Florencio Parravicini, Augusto Álvarez, Enrique García Velloso, el periodista Juan José de Soiza Reilly, Josué Quesada, Alfredo Camiña, Valerio J. Castellini, Arturo Mario, Julio C. Traversa, Enrique Muiño, el abogado Pedro B. Aquino, José González Castillo, Héctor G. Quiroga, Joaquín de Vedia, Francisco E. Collazo, Roberto Casaux y Alejandro E. Berruti obteniendo el 6% de los votos, resultando electos los señores Parravicini y Álvarez.
Álvarez, que obtuvo la mayoría de votos, perdió la banca al descontárseles los sufragios individuales, Parravicini ejerció como concejal hasta 1930, pero su desempeño imprevisible, en general, defraudó al ambiente.
El Partido había hecho una excelente campaña ubicándose en cuarta posición detrás de la Unión Cívica Radical, el Partido Socialista y la Unión Cívica Radical Antipersonalista y por delante de los partidos Nacionalista, Comunista, Salud Pública, Unitario, Comunista Obrero, Unión Fomento Edilicio, A. C. Independiente, Sindicato Médico, Feminista y los votos en blanco.