Un proceso en el que intervienen partículas virtuales puede describirse mediante una representación esquemática conocida como diagrama de Feynman, en la que las partículas virtuales se representan mediante líneas internas.
Incluso en el vacío más perfecto, ya sea el que se cree en un laboratorio, el espacio intergaláctico, o el vacío interatómico, son creados continuamente bosones de gauge con una existencia extremadamente breve.
La mecánica cuántica predice que la energía del vacío nunca puede llegar a ser cero.
[3] Algunos de estos bosones también se presentan como partículas reales en distintos fenómenos: Pero una cuestión aún a resolver es saber si todos los bosones de gauge sin masa que existen, incluidos los que arriba se exponen como reales, son al fin y al cabo virtuales.
Este fenómeno contrario a lo que ocurría antes con el electrón se llama antiapantallamiento.
Pero esto no es así pues el agujero negro «paga», cediendo un poco de su propia energía a la realidad.
El proceso continuado hace perder continuamente energía al agujero negro hasta que tras un tiempo directamente proporcional a la superficie del horizonte de sucesos el agujero desaparece completamente.