Posee una superficie suavemente ondulada y está densamente arbolado.
El 24 se inauguró como Cementerio Público del Sud el cual al principio recibía a los fallecidos por cólera, pero tras la epidemia de fiebre amarilla también acogio a las víctimas quedando repleto.
Posteriormente varios cuerpos acumulados en el predio fueron trasladados a otros cementerios, como el caso del escritor José Mármol y del médico Francisco Muñiz que fueron llevados al Cementerio de la Chacarita.
En el año 1928 se cambió su nombre y el nombre de Parque Rivadavia pasó al actual Parque en Avenida Rivadavia y antiguamente llamado Quinta Lezica.
El nombre que actualmente lleva el parque homenajea al eminente naturalista argentino Florentino Ameghino.