[3][4] Paro fue clasificado como Clase 2 dispositivo médico por los reguladores estadounidenses en el otoño de 2009.Esto también beneficia a los niños, ya que los robots son compañeros sociales para quienes interactúan con él.El estudio encontró que, como resultado de los robots, "se encontraron efectos alentadores como un mayor compromiso, mayores niveles de atención y comportamientos sociales novedosos, por ejemplo, atención conjunta e imitación, cuando los niños interactúan con los robots" (Huijnen, 2016, p 2010).Shibata lo diseñó para buscar activamente el contacto visual, responder al tacto, abrazar a las personas, recordar rostros y aprender acciones que generen una reacción favorable.[4] Dr. Bill Thomas, fundador del Proyecto de la casa verde que tiene como objetivo reemplazar la atención a largo plazo en hogares de ancianos con entornos pequeños y hogareños donde las personas pueden vivir una vida plena e interactiva, expresó su preocupación sobre si era humano confíe la tarea de apoyo emocional para los seres humanos a los robots.
El 7 de junio de 2018, el Dr. Takanori Shibata sostiene su creación PARO, un dispositivo de terapia de robot.