Paramahansa Yogananda

Según Sananda (su hermano menor), Mukunda tenía desde niño consciencia y experiencias extraordinarias de lo espiritual.

Describió su primer encuentro con Yukteswar como una renovación de una relación que había tenido lugar durante muchas vidas anteriormente, y escribió lo siguiente sobre el comienzo de la relación con su maestro: «Entramos en una comunión silenciosa; las palabras parecían superfluas.

En 1915 formalizó sus votos ingresando en la orden monástica suami y pasó a llamarse Swami Yogananda Giri.

[1]​ En 1917, Yogananda fundó una escuela para muchachos en Dihika (Bengala Occidental), combinando técnicas pedagógicas modernas con la enseñanza del yoga y los ideales espirituales.

Yogananda fue el primer maestro hindú de yoga que se estableció permanentemente en Estados Unidos, donde vivió desde 1920 hasta 1952, salvo una visita a India (entre 1935 y 1936).

Se encontró también al físico Chandrasekhara Venkata Raman, ganador del premio Nobel, y con varios discípulos de Sri Yukteswar.

Tras volver a Estados Unidos, siguió dando conferencias, escribiendo y fundando centros en el sur de California.

Enseñó que el kriyā yoga, y otras prácticas de meditación, ayudan a las personas a alcanzar esa comprensión, que llamó self realization, en inglés ‘darse cuenta de sí mismo’, —siendo realize: darse cuenta’—, incorrectamente traducido como «auto-realización».

En 1999, la editorial Harper Collins (que lo publicó) lo declaró uno de los «100 libros más importantes del siglo XX».

Por ejemplo, al empezar a ver por primera vez a través del simbólico «tercer ojo» del espíritu, relata que podía ver en todas direcciones, no solamente hacia adelante, sino también por los lados, hacia atrás, hacia arriba y hacia abajo, pudiendo además ver a través de los objetos sólidos como paredes, etc. Para alcanzar y experimentar este estado de samādhi sería necesaria la cesación absoluta de todo movimiento y actividad del cuerpo, parándose la respiración, la actividad cerebral, y el metabolismo, con lo que se produciría la desconexión total y absoluta con el mundo exterior y con lo que nos ata al mismo, el cuerpo, que a su vez limita y ata nuestra conciencia, que, una vez libre de la limitación de la conexión con el cuerpo podría ampliarse de forma inconcebible.

Yogananda llama a este estado corporal (llamado samādhi en yoga), «animación suspendida», que sería una especie de «muerte reversible o temporal», en que el cuerpo está totalmente muerto, pero la consciencia totalmente despierta, expandiéndose sin límites de forma inimaginable hasta hacerse una con Dios.

Tras larga práctica adicional finalmente se conseguiría el control total (nirvikalpa samādhi), pudiendo entrar y salir de este estado a voluntad.

Este libro ha sido publicado en todo el mundo y traducido a numerosos idiomas.

[14]​ La organización fundada por Paramahansa Yogananda, Self-Realization Fellowship, publica sus escritos, lecturas, materiales de audio y vídeo y lecciones de Self-Realization que se envían por correo para estudio en casa a cualquiera que los solicite.

Ella también fue elegida y entrenada personalmente por Paramahansa Yogananda para dirigir el trabajo después de su fallecimiento.

Yogananda a los seis años de edad.
Yukteswar y su discípulo Paramahansa Yogananda.
Yogananda en Boston en 1925.
Yogananda en la sede central de la Self-Realization Fellowship en Los Ángeles en 1938 junto con otros acompañantes.
Paramahansa Yogananda meditando en 1910.