Los dos palacios principales están unidos por unos jardines organizados en tres niveles que representan diversas alegorías.
Ambos palacios se unieron mediante un parque simétrico, diseñado según los modelos franceses e italianos, con numerosas esculturas y fuentes.
El jardín contaba con una escenografía cerrada formada por setos recortados, incluso durante la construcción del Belvedere, a la manera francesa (jardin à la française) con paseos de grava y jeux d'eau del arquitecto Dominique Girard, que se había formado en los jardines del Versailles como alumno de André Le Nôtre.
Entre los autores de los que exhibe obras están Gustav Klimt, Egon Schiele, Oskar Kokoschka o Max Oppenheimer.
Para ir a los Palacios Belvedere se debe tomar el Metro de Viena.