El ovovegetarianismo es una dieta vegetariana que excluye la carne, el pescado y los lácteos —es decir, leche y sus derivados, como el queso y la mantequilla— pero sí incluye los huevos y sus derivados, además de los alimentos vegetales como cereales, legumbres, setas, frutas, verduras, etc[1].
Su mayor ventaja es que, al incluir el huevo dentro de la dieta, se obtienen las proteínas y la vitamina B12 necesarias para mantener el cuerpo saludable[2].
Las personas ovovegetarianas no consumen productos lácteos, a diferencia de las personas lactovegetarianas, quienes no consumen huevos[3].