Orunmila

Está formado por símbolos o combinaciones del sistema binario llamados Oddu, que representan en todo el universo en el tablero los 256 signos de Ifa, su contexto, los dieciséis Melli de Ifá y en igual número representan los dieciséis reinados conocidos en el comienzo en la religión, en Ilé Ifé, lugar donde nace la cultura Yoruba.

Los oddu tienen un orden jerárquico y un nombre que los distingue los primeros dieciséis o pareados, que combinados entre sí dan lugar a 256 Odu o Principales de Ifá por el cual se conforma el cuerpo literario de Ifá, con refranes y patakky (historias).

Con respecto a él se ha creado todo un complejo religioso que lo hace diferente y lo singulariza de los demás orishas.

Quien no sigue sus consejos, sea hombre u orisha, puede sufrir las calamidades (osogbu) inducidos por Eshu Elegguá.

Los que predicen y adivinan con Orunmila a través de estos oráculos son llamados Babalao u Oluos.

en la actualidad existen libros que con información que prestigiados religiosos han ido recopilando y de cierta forma difundiendo la palabra de ifa, pero en el pasado se basaba únicamente en la experiencia y las enseñanzas del padrino hacia sus ahijados.

por lo tanto muchos de los secretos se han quedado perdidos pero Orunmila da a los babalawos el aché (àṣẹ en yoruba) o bendición para que sus ebbó tengan el efecto necesario para salvar a todo aquel que pida la ayuda y protección de los orishas.

Las ofrendas a Òrúnmìlà incluyen chiva, pargo, gallina negra, paloma y venado, aunque en otras ceremonias puede serle ofrendado otro tipo de animales, que incluyen ceremoniales propios de tal hecho.

Se le toca en el lugar después de Oshún y comprende tres toques.

Al saber que Oggún había querido fornicar con su propia madre, Obatalá ordenó matar a todos sus hijos varones.

Cuando nació Changó, Eleguá se lo llevó escondido a Dadá, para que lo criara.

Un día Obatalá enfermó; Elegba buscó corriendo a Changó para que lo curara.

Crio a varios sacerdotes celestiales y también tuvo muchos subtítulos trabajando para sí.

Hizo muchos trabajos en el cielo aunque estos no están presentes en los cuentos ya que no le permitió a sus seguidores en el cielo que vinieran a la tierra, los cuales hubieran revelado sus trabajos celestiales aquí en la tierra.

La oscuridad dijo que ya él estaba dotado con los rasgos adecuados para exigir respeto y miedo donde fuere.

Candomblé en el Museo Afrobrasileño, Salvador.