La organización y dirección artística de tal concierto corrió a cargo otra vez del maestro José Cuevas quien en esta ocasión protagonizó un éxito extraordinario, lo cual impulsó al músico a organizar una orquesta sinfónica dentro de un Instituto Cultural que él dirigía.
Los años de la revolución y lo caótico del ambiente social hicieron que la orquesta pronto desapareciera.
[1] Volvió a gestarse otro intento serio de integrar una orquesta sinfónica hasta 1922, en época del gobernador Felipe Carrillo Puerto.
Este conjunto fue evolucionando hasta convertirse en la Orquesta Sinfónica de Mérida, que se presentó en varios conciertos exitosos en el Teatro Peón Contreras nombrándose como su Director musical titular al maestro Francisco Sánchez Rejón quien amplió considerablemente el repertorio de la orquesta.
Tres años se mantuvo este esfuerzo loable ya que en 1938 tuvo lugar su última temporada.
Su sede principal fue el Teatro Daniel Ayala Pérez aunque más tarde se trasladó al recién remozado Teatro Peón Contreras bajo la dirección del maestro Antonio Cabrero, con quien se concluyó esta nueva etapa del quehacer filarmónico en Yucatán.