En el aspecto físico Olocuilta está limitado por los siguientes municipios: al norte, por Santo Tomas y Santiago Texacuangos (Departamento de San Salvador), al este por San Francisco Chinameca, Cuyultitan; y al sur por San Juan Talpa, por el Departamento de la La Paz y San Luis Talpa del Departamento de la La Paz y al oeste, por Panchimalco (Departamento de San Salvador).
También hay servicio de las rutas 131, 133 A, 133 B, 185, 302 y 495; pero no ingresan al poblado.
La ruta fue cubierta en parte por microbuses de la ruta 21 pero actualmente ya no brindan servicio En idioma Nahuat su nombre significa «Ciudad de los Gusanos Medidores», ya que proviene de “olocuil”, gusano medidor, y “ta”, ciudad (sufijo locativo).
El clima es cálido, pertenece al tipo de tierra caliente.
Las especies arbóreas más notables son: Cedro, Ceiba, Bálsamo, Copinol, Cortez negro, Ojushte, Papaturro, Conacaste, Laurel y Morro.
Corre de noroeste al sudeste hasta desembocar en el río Tihuapa.
Desde que entra a este municipio, desde su desembocadura sirve de límite departamental entre San Salvador y La Paz.
Tiene como afluentes el río Chichigazapa o Chichicalapa y la quebrada Muguata.
Sirve de límite municipal entre San Francisco Chinameca y Olocuilta.
Había por aquellos pueblos dice la “Relación Breve y Verdadera” gran hambre, y para remediarla algún tanto comían los indios de unas hormigas grandes que hay en aquella tierra, las cuales vio el padre Comisario, aquella madrugada en Tetzacuango (Santo Tomás), y que andaban los indios con lumbre a caza de ellas para comerlas y venderlas en los Tiangues.
Contra él, agrega Cortés y Larraz, “dieron memoriales (quejas) algunos principales del pueblo, que fueron como cuatro y en asuntos de la mayor consideración, pues entre ellos eran: haber dejado de dar los Sacramentos a cuatro (personas) en el artículo de la muerte, por estar en una hacienda; y haberse ausentado en tiempo de la Cuaresma a la ciudad de San Salvador, en donde permaneció muchos meses, sin haber dejado coadjutor, ni quien asistiera a la Parroquia.
Arzobispo agotó los medios para comprobar los cargos, pero le fue imposible lograrlo, ya que todos los testigos daban respuestas falsas sugeridas por el cura Andonaegui, quien previamente hizo salir del pueblo a los autores de los memoriales.