Al ser considerado el buque insignia de la firma ahora desaparecida (cabe recordar que Oldsmobile fue descontinuada en 2001), contaba con los elementos tecnológicamente más avanzados disponibles por aquel entonces, como la transmisión automática Hydramatic, el Autronic Eye, un atenuador de faros automático y el sistema Twilight Sentinel (una función que enciende y apaga automáticamente los faros a través de un temporizador, según lo controlado por el conductor), y el acabado interior y exterior de más alta calidad.
Previamente, con mayor precisión, de 1932 a 1938, había dos modelos, el F-Series y el L-Series.
En 1940 se introdujo una carrocería más grande, y fue la única que recibió energía del motor en línea de ocho cilindros.
La tercera generación se caracterizó por tener un paso estirado a 3200 mm (126 pulgadas).
En la séptima serie el 98 seguía diferenciándose de la serie 88 al seguir usando la plataforma C de General Motors, cabe decir que en 1965 se presentó el 98 Luxury Sedan, que proporcionaba un interior bastante lujoso, junto con otras comodidades que no se podían encontrar en los otros 98, como los portavasos y los asientos eléctricos.
Podría funcionar tanto con gasolina sin plomo como con combustibles que contengan un volumen alto o bajo de este compuesto.
Para cubrir el vacío dejado por este modelo, se lanzó una versión del Oldsmobile 88 llamada Regency.