Oiseau Bleu

[2]​ Debe su nombre a la obra de teatro homónima escrita por Maurice Maeterlinck.

[2]​ Los buenos resultados cosechados por el servicio hicieron que el recorrido inicial entre París y Amberes se prolongara hasta Ámsterdam en los Países Bajos en 1935.

[2]​ Superada la tracción a vapor y ya como Trans Europ Express la relación fue cubierta con locomotoras diésel.

[3]​ El testero de dichas máquinas, llevó a que fueran conocidas como las "nez cassés" (narices rotas) por su inclinación invertida.

Este diseño se extendió después a otras locomotoras francesas convirtiéndose en toda una seña de identidad para los ferrocarriles del país.