[5] Entre las características propias se encuentran el tener gruesas barras cubitales blancas, color que repite en extensos parches en el inferior del ala, en la parte inferior del vientre y en el área de la cloaca.
[2] El plumaje dominante de color pardo-negruzco se presenta en todo lo dorsal, incluyendo la cabeza, si bien poseen una tonalidad gris plateada lavada la nuca, el dorso, las escápulas y la parte superior de la rabadilla.
Además se diferencia de otros petreles por tener un plumaje juvenil distinto.
Fue descrita originalmente en el año 2013 por un equipo de ornitólogos integrado por Peter Harrison, Michel Sallaberry, Chris P Gaskin, Karen A Baird, Álvaro Jamarillo, Shirley María Metz, Mark Pearman, Michael O'Keeffe, Jim Dowdall, Seamus Enright, Kieran Fahy, Jeff Gilligan y Gerard Lillie.
A estos se les sumó el ejemplar tipo, una hembra capturada el 19 de febrero de 2011 en la misma zona y que presentó las siguientes medidas: Además cuenta con dos paratipos, una hembra juvenil y un macho, que originalmente estaban identificados como Oceanites oceanicus y habían sido colectados por el ornitólogo argentino Andor Kovács en El Bolsón, provincia de Río Negro, Patagonia argentina, en 1972 y 1983 respectivamente, y que tienen las siguientes medidas: Como ocurrió en estos dos casos, la llegada a los lagos andinos de la Patagonia argentina de aves marinas provenientes de las aguas del sur de Chile es un hecho bastante frecuente, ya que las mismas son arrastradas por los fuertes vientos del cuadrante oeste, los que se suelen presentar cada cierto tiempo, especialmente durante la primavera austral.