Cuando Báltica y Laurentia chocaron entre sí a finales del Ordovícico para formar el continente de Euramérica, el océano Rheico ya se había ampliado, en sustitución del océano de Japeto, que en este momento se había convertido en un estrecho canal entre Avalonia y Laurentia.
El océano Reico se empezó a cerrar en el Devónico, cuando el supercontinente Gondwana deriva hacia Euramérica.
A finales del Devónico, se convirtió en un océano estrecho entre Gondwana y Euramerica.
En el Carbonífero Inferior (Misisipiense), la parte oriental del océano Rheico ya se había cerrado, debido a la colisión del este de Norteamérica con África.
Más tarde, Sudamérica chocó contra el sur de Norteamérica, cerrando completamente el océano y formando finalmente el supercontinente Pangea.