Cuando se encuentran debajo de las carreteras, con frecuencia están vacíos.
Una obra de drenaje transversal también puede ser una estructura similar a un puente diseñada para permitir que el tráfico de vehículos o peatones cruce la vía fluvial mientras permite un paso adecuado para el agua.
[11] Originalmente, las obras de drenaje transversal se denominaban alcantarillas, y se empleaban tres formas geométricas para construirlas: circular, rectangular y abovedada.
Posteriormente, se utilizó el acero corrugado, el cual permitía tanto las formas circulares como las abovedadas, aunque este material está cayendo en desuso en España.
En la actualidad, predominan las obras de drenaje transversal realizadas en hormigón armado, tanto circulares como rectangulares (marcos) o abovedadas (bóvedas), construidas bien in situ o bien prefabricadas.
Se pueden combinar dos o más materiales para formar estructuras compuestas.