Nueva Angulema (en francés La Nouvelle-Angoulême o Terre d'Angoulême) es el nombre dado a la bahía formada por la desembocadura del Hudson por el navegante de origen florentino Giovanni da Verrazzano, cuando la descubrió en 1524 a bordo de la pequeña carabela La Dauphine.
Anclando en los barrios actuales de Brooklyn y Staten Island, fue el primero en conocer a los nativos americanos.
Escribió un informe para el rey donde los describe así: añadiendo igualmente que: El territorio donde viven es descrito también como «el más grato que se pueda contar, apto a todos tipos de agriculturas: trigo, vino o aceite».
[3] Verrazzano plantó la bandera del rey de Francia y se fue, sin una instalación duradera.
Esta área permaneció inexplorada por los europeos durante varias décadas, siendo visitada ocasionalmente por comerciantes de pieles o exploradores, como Esteban Gómez en 1525.