Noemí del Castillo

Participó en producciones como Nino, las cosas simples de la vida (1971), Los irrompibles (1975), Torbellino (1997) y María Emilia, querida (1999).

Podemos citar Coqueluche con Thelma Biral, Niní Marshall, entre otros, temporada con seis años en cartelera, La dama de las camelias con Jorge Luz, ¡Viva la pepa!, Discepoliana.

En 1968, participa de la telenovela Adorable profesor Aldao, junto con Guillermo Bredeston y Beatriz Taibo, personificando a la señorita Peralta.

En 1971, participa de la película Así es Buenos Aires, junto con Ricardo Bauleo, Víctor Bó y Susana Giménez, entre otros.

Es además esta novela la que la llevará años después a vivir de manera permanente en el Perú.

En 1971, Noemí protagoniza junto con Rosanna Falasca, Roko y Norberto Pardal, Palolo, el filme ¡Arriba juventud!, rodado en gran parte en la provincia de Jujuy.

En paralelo a sus trabajos en TV, Noemí del Castillo formó parte del elenco de la película Las procesadas en 1975, dirigida por Enrique Carreras, y junto con un importante elenco, como Susana Rinaldi, Mercedes Carreras, Olga Zubarry, Leonor Manso, Betiana Blum, entre otras.

También en 1975, forma parte del elenco de la película No hay que aflojarle a la vida junto con Palito Ortega, Juan Carlos Altavista, Olinda Bozán, Javier Portales, entre otros.

Ese mismo año 1977, es parte del elenco de la novela El hombre que yo inventé con María Aurelia Bisutti, Jorge Martínez, etc. Noemí se había hecho muy popular en el Perú gracias la novela Nino, las cosas simples de la vida, emitida en Perú por Panamericana Televisión.

Gracias a ello, había llegado a Perú por el aniversario de la televisora, con muchos integrantes del elenco, años después con Pepita Muñoz (doña Nena) y Maurice Jouvet (don Max) para grabar juntos un comercial de Desenfriolito.

Curiosamente quien le habría hecho llegar el contrato fue Ernesto (Tito) Reyes, joven abogado quien luego sería su esposo.

Noemí se nacionalizó peruana por matrimonio, portó su DNI con orgullo, sintió siempre un cariño profundo y genuino por la tierra que la cobijó.

En 1984, en la novela Páginas de la vida con Pilar Brescia, Víctor Hugo Vieyra, Gloria María Ureta, etc.

En Perú, continuó su carrera artística participando en diversos Café Concert con diferentes figuras como Vinko, Gal Matarazzo, etc.

También dicho año, fue invitada especial de la serie Cero en conducta por Panamericana, donde su hija, Laura Reyes, tenía un rol principal.

También en 1998, encarna a Juana en la novela de Iguana Traversuras del corazón con Patricia Pereyra, Regina Alcóver, Yvonne Fraysinnet, y Stephanie Cayo aún niña.

En 1999 y 2000, asume el personaje de Generosa Gómez en la novela María Emilia, querida en América Televisión.

Por tanto, decidió asistir al médico, de manera que pueda llevar la temporada próxima sin dolores.

El médico le indica que estaba muy inflamada y por ello no podía operarla muy pronto, la encuentra con arritmía y la envía a la zona de emergencia donde le realizarían un electrocardiograma, así como administrarle por vía intravenosa unos medicamentos para aliviar el dolor e inflamación.