Mientras que los Matsugae cuentan con una mejor posición económica, los Ayakura son una familia de mayor raigambre nobiliaria.
Ella, por su parte, entregada desde el primer momento al amor que siente por el joven Kiyoaki, opta finalmente por retirarse a la soledad de un convento antes que verse forzada por su familia a casarse con otro hombre.
[6] La tetralogía El mar de la fertilidad, de la que esta novela es su primera obra, es considerada el testamento ideológico y literario del autor.
Desarrollada desde los comienzos del siglo XX hasta la década de 1960 en ella Mishima muestra su rebeldía contra la sociedad japonesa que él consideraba sumida en la decadencia moral y espiritual.
Uno de esos autores que, al leerlos, piensas ‘ojalá fuese yo’.