Nicomedes II de Bitinia
La popularidad de Nicomedes II era elevada aun antes de que su padre dejara el trono, por lo que este le envió a Roma para limitar su influencia en el reino.Sin embargo, Nicomedes II también obtuvo simpatías del Senado romano,[1] lo cual obligó a su padre a enviar un emisario secreto con la misión de asesinarlo.No obstante, el emisario reveló el complot y persuadió al príncipe a iniciar una rebelión en contra de su padre.Le sucedió su hijo, Nicomedes III, cuya autoridad no fue unánimemente reconocida.A Dictionary of Arts, Sciences, Literature, and General information (en inglés) (11.ª edición).