[1] Desde finales del siglo XVII se rinde culto en las Palmas de Gran Canaria al Niño Jesús Enfermero, también conocido como el Divino Infante.
Así como otras devociones de los pasados tiempos han sido olvidadas o preteridas, esta devoción al santo Niño Jesús Enfermero se ha mantenido constante y hasta en aumento.
Fue fundado este monacato en el año 1664 y estuvo en pie hasta la primera mitad del siglo XIX, en que se inició su demolición.
En el año 1840 expulsaron a las monjas claras de su convento y demolieron éste para construir un teatro.
Anualmente se le consagra un solemne triduo que tiene lugar a finales de la primera quincena de enero, coincidiendo el acto litúrgico más importante en sábado, último día del citado triduo en su honor.