A partir de 1928, Marsh dividió su tiempo viviendo en el Reino Unido y en Nueva Zelanda.
Junto a Agatha Christie, Margery Allingham y Dorothy L. Sayers, es considerada una de las cuatro "Reinas del Crimen", las escritoras británicas que dominaron el género de novela negra durante la Era Dorada del género durante los años 1920 y los años 1930.
Por ejemplo, Alleyn se casó con una pintora, Agatha Troy, a quien conoce durante una investigación (Artists in Crime) y quien aparece en varias de las novelas.
En 1944, la obra, junto a una producción de Otelo, realizó una gira por Nueva Zelanda, la cual fue aclamada por la crítica.
Durante los años 1950, Marsh trabajó con los New Zealand Players, un proyecto que intentaba crear una compañía de teatro nacional.