Neferirkara II fue el último faraón menfita de la Dinastía VIII (ac.
2161-2160 a. C.), que transcurre durante el primer periodo intermedio de Egipto.
Tras el hundimiento del Viejo Orden,[1] al final de la Dinastía VI, los nomarcas del Alto Egipto establecieron la hegemonía sobre sus territorios.
Neferirkara podría pertenecer a un consejo temporal de mandatarios, constituido en un periodo de dificultades políticas o económicas.
[2] Fue derrocado por Actoes (Jety I), que dio un golpe de Estado, y se proclamó faraón en la ciudad de Henen-Nesut (Heracleópolis Magna), aunque inicialmente su autoridad solo fue reconocida en las regiones más próximas, comenzando así la dinastía IX.