Su principal influencia ha sido en el Reino Unido, donde vivió en los años 1930 y presentó el Constructivismo a una generación de artistas como Barbara Hepworth, Ben Nicholson, Victor Pasmore o Peter Lanyon que vinieron a dominar las artes visuales de posguerra.
En 1913-14 visitó a su hermano Pevsner en París y tuvo la oportunidad de estudiar los cuadros cubistas.
En agosto de 1920 resumió sus ideas en el Manifiesto Realista (Realistícheski manifest), Gabo no pudo aceptar el imperativo utilitario de los constructivistas rusos y en 1922 abandonó Rusia y marchó a Berlín.
Estas construcciones más tempranas eran originalmente en cartón o madera figurativas como el Head No.2 en la colección de Tate.
Él regresó a Rusia en 1917, involucrándose en la política y arte por lo que pasan cinco años en Moscú con Pevsner.