En este proyecto se logró implicar al ayuntamiento de Valencia que cedió el Palacio de la Exposición y prometió que en el futuro museo se integraría una parte de las colecciones municipales.
[1] Poco a poco, gracias al empuje de Maximiliano Thous y de Enric Durán i Tortajada, se fue materializando con hechos este proyecto pero enfocándolo desde un punto de vista más nacionalista que del regionalismo inicial con el que se había formado.
[1] La finalidad del museo era la de agrupar todos los objetos de carácter mueble pertenecientes al patrimonio municipal, entre los que se incluían objetos de naturaleza artística y arqueológica, sin unos criterios museísticos claros.
[1] No fue hasta los años 70 del siglo XX que se comienzan a producirse algunos cambios reseñables.
Así, en el año 1973 la Delegación de Archivos, Bibliotecas y Museos, propone la adquisición del recientemente declarado monumento histórico-artístico de interés local, palacio de Berbedel; compra que se materializó un año después, pasando a llevarse a cabo unas reparaciones de urgencia y obras de remodelación para adaptar el edificio para su uso como pinacoteca municipal.