La comunidad judía ha tenido presencia en Granada más de quince siglos, durante los cuales, y especialmente durante la edad de oro de los judíos andalusíes, brindó a la ciudad muchos personajes relevantes, entre científicos, literatos, políticos y artesanos, como Samuel Ibn Nagrella, que dotó a la ciudad de un sistema de baños públicos, o Yehudá Ibn Tibon, médico, traductor, visir y poeta granadino.
[3] El barrio del Realejo está situado en el casco antiguo de la ciudad, a los pies de la Alhambra por su cara suroriental.
Sus orígenes se remontan al arrabal judío de la Granada musulmana, recibiendo el mismo el nombre «la Granada judía» (Garnata(t) al-Yahud en árabe).
[1] Destacan en la exhibición una colección de objetos del culto judío, una cocina de cerámica y un patio diseñado al estilo sefardí.
El museo ofrece también excursiones guiadas por el barrio judío de Realejo.