Anusim

El término se deriva de aquel en el Talmud, “aberrá be’ones” [TB Abodá Zará 54a]:

Las dos más comunes son: min (apóstata), el judío que rechaza la existencia de [un solo] Dios; y meshumad (hereje), aquel judío que no se adhiere a la observancia de la ley.

Por ejemplo, a Sigmund Freud –ateo declarado– se le considera un min bajo la ley judía; Albert Einstein –que creía que en la existencia de Dios, pero no observaba la ley judía– es considerado un meshumad; y el rabino Salomón ben Verga, a quien se lo obligó a convertirse al catolicismo en 1497, pero se mantuvo fiel y observante al judaísmo, era un anús.

Rashi, rabino francés que vivió durante este periodo, escribió sobre el tema en sus opiniones legales.

En la literatura laica no-rabínica, a los anusim se les refiere como “conversos”, “cristianos nuevo", “criptojudíos” o “marranos”.