Desde sus inicios, el inmueble ha sido utilizado para los más diversos usos, desde Ayuntamiento hasta colegio, pasando por biblioteca, sala de exposiciones temporales, y actualmente museo.
Aunque durante un tiempo el edificio estuvo prácticamente en desuso, hoy en día se ha convertido en un lugar dinámico y cultural, y en motor del casco antiguo de la localidad.
La primera planta tiene entrada por la Plaza Mayor, y tiene dos vanos que son ocupados por ventanales, y en el vano central se encuentran dos puertas de entrada.
El vano central está adornado por dos pilastras encajonadas que hacen las veces de pilares del balcón superior.
La torre del reloj tiene forma cúbica, asentada sobre tres arcos de medio punto, y una pared en la parte trasera.
La cara principal de la torre tiene un friso en forma de semicírculo en el que una inscripción dice Casa Consistorial, y que rodea al escudo imperial español.