Muerto al llegar

(titulada Muerto al llegar en Hispanoamérica y España) es una película estadounidense de suspense de 1988, dirigida por Annabel Jankel y Rocky Morton y protagonizada por Dennis Quaid y Meg Ryan.

La película narra la llegada de un hombre malherido a la comisaría donde pretende denunciar su propio intento de asesinato.

En su declaración recuerda lo sucedido en las últimas horas.

El hará de todo para averiguar quién le asesinó y por qué, pero no tiene demasiado tiempo.

La música fue compuesta Chaz Jankel.