Una de las características centrales de la organización es reivindicar el derecho a la ciudad y a la vivienda.
[1] En abril de 1991 ciento veinte familias, organizadas en la Cooperativa San Telmo,[2] ocuparon el espacio en reivindicación de la vivienda autogestionaria.
[3] Una de las bases en las que se sostiene el Movimiento de Ocupantes e Inquilinos es en el derecho a la radicación y a una ciudadanía más democrática.
[3] En este sentido el movimiento recién conformado lleva a cabo estrategias de acción fundadas en la regularización dominial y en el derecho a la vivienda, elaborando un proyecto de organización y gestión que implicó a múltiples actores sociales y políticos, entre ellos: estudiantes de una cátedra de diseño de la Facultad de Arquitectura-UBA, referentes del Centro de Estudios del Hábitat, la Fundación Vivienda y Comunidad- y el Secretariado de Enlace de Comunidades Autogestionarias.
[7] El Movimiento de Ocupantes e Inquilinos se encuentra compuesto por múltiples cooperativas de vivienda y trabajo ubicadas en diferentes provincias de la Argentina.