[2][3] La mouna o mona se parece a la mona de Pascua española, a menudo se dice que este dulce fue traído por los valencianos que vivían en Orán.
La masa se divide en pequeñas bolas que se embadurnan con yema de huevo batida con un poco de leche y entonces se cubre la parte superior con pequeños trozos de azúcar aplastados.
Algunas pueden estar rematados con un huevo cocido de gallina.
Las bolas, colocadas en una bandeja grande y separadas, se cuecen después en el horno.
Se come el domingo de Pascua o el lunes siguiente durante una excursión tradicional.